Framework de trabajo
¿Como desarrollamos nuestros proyectos?
Agilidad con proposito,
evolución continua
Un método simple: entender primero, ejecutar después. Definimos "viable" sin confundirlo con "perfecto", construimos con velocidad una pequeña versión de lo que buscamos. Después, el ciclo que realmente nos funciona: planificación realista, desarrollo enriquecido por los aprendizajes, y una evolución constante hasta ese punto revelador donde miramos hacia atrás y sentimos vergüenza de lo que antes nos enorgullecía. Ahí sabemos que realmente avanzamos.
MVP
Entendemos antes de hacer. Nos sumergimos en el problema para diseñar soluciones con sentido, definiendo claramente qué significa "mínimo viable". No buscamos lo perfecto, sino lo que realmente funciona. Con este norte claro, concentramos todos nuestros recursos en desarrollar rápidamente, porque sabemos que el tiempo es tan valioso como las ideas.
PRO: Una versión operativa del entregable en poco tiempo para usarla y probarla.
Review
Este es el momento de la verdad, no un trámite de aprobación automática. Ponemos todas las cartas sobre la mesa: lo que funciona, lo que falla y lo que ni siquiera llegó a probarse. Una conversación honesta que separa lo que está listo para implementarse de lo que necesita otra vuelta. Porque algunas soluciones imperfectas ya generan valor, mientras otras requieren más trabajo antes de ver la luz.
PRO: Discusiones de valor con los interesados con el objetivo de mejorar.
La evolución
Acción concreta sobre promesas vagas. Definimos con precisión quién hace qué y cuándo, contemplando lo inesperado. Volvemos a desarrollar con aprendizajes frescos, mejorando constantemente lo que ya existe. Este ciclo virtuoso continúa hasta alcanzar lo comprometido, y solo paramos cuando miramos atrás y sentimos vergüenza por nuestras versiones anteriores – la señal más clara de que realmente evolucionamos.
PRO: Entregables y productos que evolucionan a escala para ir dando valor adicional de manera frencuente.
¿Qué logramos?
Reducir el riesgo de invertir tiempo y recursos significativos en funcionalidades que no son necesarias o no cumplen con las expectativas. Además, facilita la entrega temprana de valor y permite realizar ajustes y mejoras iterativas en ciclos cortos, asegurando que el producto final se alinee mejor con las necesidades reales y evolucionando de manera más eficiente.